Después de un día agotador, largo muy pero muy largo, pero corto. Así es, porque después de despertar cansada, correr al trabajo, tener un encuentro cercano de tercer grado con el metro de Santiago, dar lo mejor en el trabajo, sudar la gota gorda, y la flaca también en la bicicleta, desde el trabajo a la casa, llegar, correr, pasear a Mila, jugar con Mila, hacer de dueña de casa al pum, hacer el programa de Radio @bebloggera junto a Pamela Victoria, que por cierto estuvo fenomenal con nuestra super invitada @carmentuitera. Luego de eso cocinar, ver Hurrem, estudiar inglés y escribir este post. Mi día termina con esta foto, con mi compañera del día a día, esa que me obliga a cansarme más y sacar energías desde no sé donde, aprendí que no solo se pueden pasear animales por las calles de Santiago, eso aprendí de Carmen, sino que también se pueden pasear troles, sí, leyó bien, gente mala onda que a veces también es verde y tienen mucho tiempo libre para opinar de la vida del otro.
Aprendí de ella también que no solo el sol, las estrellas, mi sable láser, la luna, el manjar colun y don chispita brilla, sino que también brillo yo, no sé qué tanto a esta altura del día, pero brillo. Aprendí también que si no brillas por cuenta propia posiblemente puedes tirarte algún polvo o escarcha arriba para poder hacerlo.
Aprendí que quiero ser grande, más alta no pero más grande, no más gorda pero si grande.
Aprendí porque siempre siento que no es suficiente, descubrí porqué hago lo que hago. Aprendí que si uno nace pobre, muere pobre, al menos Piñera ayer dejo bien claro que era de clase media porque sus papás eran de clase media, ciertamente hay gente muy dormida por la vida.
Aprendí que es posible echar públicamente a todo un equipo de trabajo por televisión, así que señores ministros es momento de que pongan una PYME
Aprendí que mirando videos chistosos me puedo sentir más feliz, aun más. Gracias a @elblogdelupi por eso.
Aprendí que aun me falta tanto por aprender...
Y aprendí porque me gusta el rosado...
Aprendí que siempre hay gente que no quiere asumir sus errores y no encuentra nada más bonito que echar la pachotada antes de decir lo siento.
Aprendí que el cansancio también significa dolor corporal.
Que si no duermes mucho andas mal pero cuesta dormir de nuevo mucho.
Aprendí que una bicicleta desinflada puede ser una hija de puta, sin afán de ofender a nadie.
Aprendí que los días son demasiados cortos para mi.
Aprendí que la nariz de una persona no deja de crecer, lo que encuentro terrible, ¿hasta que punto crecerá la mía?
You never know!!!
Aprendí hoy
Hoy aprendí...
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